La ley de la conservación de energía establece que en cualquier sistema aislado de otro, en el que se produzca un cambio físico, la energía existente antes y después del mismo es invariable, aunque puede manifestarse de distintas formas (Energía calórica, cinética, potencial, etc.).
La energía no se crea ni se destruye, sino que se transforma.
La energía mecánica es la sumatoria de las energías cinética, potencial gravitatoria y potencial elástica.
E mecánica = Ec + Ep + Epe
ΔE = energía intercambiada por el sistema
Fuerzas conservativas
Se dice que una fuerza es conservativa si el trabajo total que realiza dicha fuerza sobre una partícula es cero, cuando recorre una trayectoria cerrada y vuelve a su posición original. El trabajo realizado por una fuerza conservativa es independiente de la trayectoria seguida por la partícula de un punto a otro.
Un ejemplo de una fuerza conservativa es la fuerza peso, producida por un campo gravitatorio "g"
Comprobación:
T = F . d . cos α
Ta = m .g . h . cos 180°
Ta = - m. g . h
Tb = m . g . h . cos 0°
Tb = m . g . h
Ta + Tb = - m . g . h + m . g . h = 0
Fuerzas no conservativas
Al contrario de las fuerzas conservativas, el trabajo total que realiza la fuerza en una trayectoria cerrada que vuelve al punto de origen es distinto de cero. Esto significa que existe variación en la energía mecánica, siendo parte de esa energía transformada en, por ejemplo, energía calórica. Un claro ejemplo de estas es la fuerza de rozamiento, que siempre se opone al movimiento que realice un cuerpo o partícula.